Es una palabra que ya existía en latín, aunque con el significado de ‘choza’ o ‘cabaña’, mientras que para denotar casa, los romanos usaban el término domus.
En la primera edición del Diccionario de la Real Academia (1729), se presenta la siguiente definición:
Edificio hecho para habitar en él, y estar defendidos de las incleméncias del tiempo, que consta de parédes, techos y tejados, y tiene sus divisiones, salas y apartamientos para comodidad de los moradores. Es la misma voz Latina Casa, que aunque significa Choza ò Casa pajiza, se ha extendido a qualquier género de casas.
Casa fue heredada del latín también por el italiano, lengua en la cual dio origen a otros vocablos que más tarde llegaron al español, como casino (inicialmente, ‘casa pequeña y elegante’), con la connotación de ‘burdel’; si bien en nuestra lengua se refiere a una casa de juego, principalmente de ruleta.
Otra voz surgida del italiano casa es casamata (en it. casamatta) ‘bóveda para emplazar piezas de artillería’, documentada a partir de 1520, que significa ‘casa loca’, aunque matta debería entenderse, en este caso, como ‘falsa’, por tratarse de una construcción que solo se parece a una casa, sin serlo realmente.