
Una antología es un compendio de obras literarias, pero lo que enamora es su etimología. Según el volumen Sorpresas en palabras, de Krystyna M. Libura y Gabriel López Garza (Ediciones Tecolote) viene del griego ánthos (flor) + logeia (colectar). Es decir, literalmente significa «colección de flores», luego su significado se expandió para nombrar un conjunto de poemas y, más tarde, de cualquier género literario.
Me parece bellísimo concebir los poemas como flores, muy a la manera de Netzahualcóyotl y los demás poetas prehispánicos: para decir «poesía» usaban la expresión compuesta «la flor y el canto», en una certerísima analogía que equipara la belleza, la fragilidad y la eternidad de ambas creaciones.
Pues sí, coincido: los poemas son flores, las flores son poemas.