¿Cómo resumir en un soneto la sorpresa que genera otro cuerpo, el querido, el deseado? De esta deliciosa manera lo hace el poeta mexicañol Federico Patán, de quien se me llena la boca al decir que fue mi maestro en la UNAM. Así firma el #MiércolesDePoesía…
Misterio y asombro
«Mi cuerpo, amor, junto a tu cuerpo erguido,/
lado a lado enraizados en la vida,/
arando el verde campo del sonido/
donde en simiente el ansia se suicida.//
Mi cuerpo, amor, junto a tu cuerpo herido./
Tu cuerpo flecha que en el viento anida/
un intento fugaz de ser hendido/
por el ardiente vuelo de otra herida.//
Mi cuerpo, amor, junto a tu cuerpo espiga,/
tu cuerpo sublunar, ya enriquecido/
por la tierra fugaz que lo fatiga.//
Tu cuerpo fruto que en perfil dorado/
la tarde llena con olor de nido:/
tu cuerpo misterioso y asombrado.»